La aplicación más frecuente del bruñido de carrera corta (también denominado como superacabado) es el mecanizado final de pistas de rodamiento de bolas o rodillos en anillos de rodamiento. En esta aplicación, muchas veces se utiliza una piedra de corindón en aglomerado cerámico para el acabado previo y una piedra de carburo de silicio en aglomerado cerámico para el acabado final.
En el acabado previo, (dependiendo del diámetro del anillo) se deberían rebajar unos 12 µm de medida excedente, a fin de mejorar decisivamente la ondulación de la pista de rodadura (y por ende también la suavidad de marcha del rodamiento). Debido a que en el acabado final se debe obtener sobre todo una aspereza superficial menor de 0,05 µm Ra, el rebaje total normalmente se ubica en alrededor de 2-3 µm.
Mientras mayor sea el diámetro, más grueso deberá ser el grano de rectificación de la piedra de acabado
La selección del tamaño de grano apropiado depende principalmente del diámetro del anillo. Mientras mayor sea el diámetro, más grueso deberá ser el grano de rectificación de la piedra de acabado.
Además del acabado de anillos de rodamiento, también existen múltiples otras operaciones de acabado con piedra abrasiva, en donde generalmente se utiliza un aparato oscilante de carrera corta superpuesto para completar el acabado de los diámetros exteriores de diferentes árboles, rodillos y otros componentes similares después del rectificado cilíndrico.