En el rectificado de agujas de inyección, la punta de la aguja se rectifica en un solo paso a partir del material macizo. En el ámbito de las aplicaciones médicas, con gran frecuencia es necesario rectificar materiales inoxidables de aleación extremadamente alta.
La ausencia de rebabas es uno de los criterios más importantes en este proceso de rectificado
Junto a la durabilidad de las muelas abrasivas, la ausencia de rebabas es uno de los criterios más importantes en este proceso de rectificado. Es decir que los filos (exterior) y bordes (interior) producidos por el rectificado no pueden contener absolutamente ninguna rebaba, ya que durante el uso posterior de la aguja en el paciente ello produciría un mayor dolor de presión y los bordes de la herida en el sitio de punción se "deshilacharían", lo cual a su vez prolongaría innecesariamente la sanación de la herida (es decir, del sitio de punción).
Una selección adecuada en este proceso de rectificación son las muelas abrasivas de carburo de silicio aglomerado en resina sintética con un tamaño de grano de 400 o 600.